QUÉ BUENO ESTAR JUNTOS

 Tras la mediación, el trabajo de inteligencia emocional en las tutorías, el aula de convivencia y la hoja de reflexión seguimos trabajando en mejorar la convivencia porque una estadística nos demostró que las incidencias se habían reducido un 30%.

Lo primero fue organizar las tutorías por niveles a la misma hora, ello facilitaba el que pudiera acudir todo el alumnado de un nivel a una charla o una actividad sin perder otra clase, todos iban en hora de tutoría.

Una magnífica compañera de pedagogía terapéutica decidió crear un taller de cerámica para el alumnado con algún problemilla; las actividades manipulativas les gustan y los artículos que allí se crean (increíbles, por cierto) se venden en un par de ocasiones para recaudar dinero y seguir comprando materiales (arcilla, esmaltes,...). En alguna ocasión hemos propuesto a alumnado especialmente disruptivo ir al taller como premio y ha funcionado muy bien. Esta actividad se realiza ahora en el taller de la ceramista de Pedrola, un día por semana en 2 o 3 horas. Desde aquí mi agradecimiento a todas las personas que han colaborado en este taller y en especial, a nuestra ceramista.

Se inició la labor de las tutorías individuales, parte del profesorado se ofrece a colaborar atendiendo de forma particular a un alumno o alumna. Un día por semana, en una hora de la que los dos dispongan o en un recreo se reúnen y trabajan diferentes aspectos, la conducta, el orden en la mochila o en los apuntes,... Al alumnado le gusta tener alguien que les atienda de esa manera tan cercana y reaccionan bien, en general.

Realizamos un "word coffee" con el alumnado, en realidad era un "word chuches". Trabajamos diferentes aspectos para mejorar la convivencia y se implicó a todo el alumnado de ESO, a casi todo el profesorado, algunas familias, AMPA, personal de cafetería, profesorado que hacía las prácticas del Master, en fin, que se lio bien. Esta técnica es muy interesante porque permite recabar mucha información cuando hay muchas personas y también permite gran participación. La hemos repetido en varias ocasiones con las familias del alumnado de 1º de ESO cuando llegan en setiembre, de esta manera en la primera reunión en vez de hablarles les escuchamos.

También empezamos el curso informando al alumnado de 1º y 2º sobre todos los programas para la mejora de la convivencia que hay en el centro y les animamos a que participen en ellos.

Los mediadores prepararon una charla para hablar al alumnado que se iba a incorporar a 1º de ESO sobre cómo es el instituto, deseábamos descartar miedos, dudas, falsas creencias. Fue un éxito total, tanto es así que también lo presentaban a las familias recogiendo una gran ovación.

Me siento muy feliz por haber contribuido a la mejora de la convivencia en el IES Siglo XXI de Pedrola. Sé que queda mucho camino por recorrer, pero también sé que poco a poco se irá haciendo.

  

ESO DE LLEVARNOS MEJOR

 Hace ya 12 años que empezamos a trabajar la convivencia en el IES Siglo XXI, no era mala, pero queríamos hacer algo nuevo, diferente y mejorar las relaciones entre todos.

De ahí surgió la idea de crear un programa para mejorar la inteligencia emocional en el alumnado que llamamos: "Nos Conocemos Mejor, Nos Relacionamos Mejor".

La idea de base es favorecer el autoconocimiento, la aceptación de uno mismo y mejorar la relación con uno mismo. Si me relaciono mejor con mi mismidad me resultará más sencillo relacionarme mejor con otras personas. Mejor quiere decir tener relaciones amables, intercambios de ideas sin tensiones, con tolerancia, respetando las diferencias, siendo más educados.

Una vez al mes entraba en las aulas de 1º a 4º de la ESO y trabajábamos diferentes aspectos. El alumnado lo recibía con sorpresa y agrado. Recuerdo que en una ocasión entraba en 3º de ESO y, como no daba clase en ese nivel, una alumna me mira y me dice: "¿Qué haces aquí?, ¿tenemos guardia?", le contesté que no y comentó: "¡Ah!, vienes a eso de llevarnos mejor!". Me encantó la descripción, que al menos una persona lo viviera así me pareció todo un lujo.

Así hemos ido avanzando, al final solo trabajaba con 1º y 2º, por falta de horario, no por falta de ganas.

Creo sinceramente que un programa así debería ser obligatorio en todos los centros, en Primaria y en Secundaria. No nacemos sabiendo caminar, ni hablar, ni relacionarnos adecuadamente, es un aprendizaje que debemos cultivar en los hogares y en los centros educativos.

Espero que mi jubilación no termine con esta larga y provechosa andadura.